En la última década, la sostenibilidad ambiental y la transición hacia fuentes de energía limpias ha ganado relevancia en la agenda global. A medida que avanza el tiempo, en el mundo surgen problemas asociados a los efectos del cambio climático, razón por la cual, la búsqueda de soluciones que combinen el crecimiento económico y el desarrollo sostenible se ha vuelto una prioridad. En este contexto, Finlandia emerge como uno de los pioneros en la implementación de políticas en materia de energía enfocadas no solo al crecimiento de la economía, sino que tengan un sentido de orientación hacia la sustentabilidad. Además, este país ha mostrado un gran avance para la sustitución de energías fósiles, apostando por energías más limpias y manteniendo a la vez un crecimiento económico robusto, lo que lo posiciona como un caso de estudio relevante para entender como las energías no fósiles pueden contribuir al crecimiento económico y al desarrollo sostenible de una nación.